Es uno de los tres aspectos en los que el método Audiobec hace énfasis. Sería igual a todos los métodos si
no fuera porque se determinan los grados de dificultad de la obra materializados en los pasajes musicales con mayor dificultad
y de los que se abstrae el patrón rítmico del mismo y se trabaja con ejercicios que contienen diferentes combinaciones,
rítmicas y melódicas que le dan un dominio necesario para que el estudiante pueda asumir la interpretación con éxito.
Cada uno de los ejercicios es elaborado por el profesor encargado, asegurando que se invierta de la mejor manera
tanto el tiempo como el esfuerzo del estudiante. No debe incluirse ningún ejercicio con combinación diferente a las precisadas
por la obra musical en cuestión. El método Audiobec es coherente con la teoría de Mariantonia Palacios de Sanz: mayor
rendimiento menor esfuerzo. (palacios 2000)
Los ejercicios utilizados hasta ahora en las evaluaciones hechas al método son los dictados rítmicos, lecturas rítmicas,
extracción de patrones rítmicos de un pasaje, pruebas seashore para el rítmo.
No existe una sola corchea que no tenga una razón de ser dentro de la metodología Audiobec. (Becerra 2003)
